A diez meses del inicio de su implementación, el plan piloto de «gas a precio justo» -puesto en práctica por la Empresa Nacional del Petróleo (Enap)- ha generado, sin dudas, una polémica en el mundo político. ¿El motivo? La estatal detalló -a través de un oficio a la Cámara de Diputados- que cada cilindro costó $117 mil (IVA incluido) y se vendieron, en promedio, a $15 mil, algo que provocó reacciones como la de Renovación Nacional (RN), que ingresó un requerimiento a la Contraloría para investigar si existe un eventual incumplimiento a los principios de eficiencia en el uso de los recursos públicos. De hecho, directamente parte de la bancada del partido acusó «despilfarro inaceptable». En concreto, el plan fue implementado entre agosto y diciembre de 2022 y se centró en tres comunas: Chiguayante, San Fernando y Quintero. La iniciativa permitió el acceso a 3.157 familias -que forman parte del 40% más vulnerable del Registro Social de Hogares- a la compra de cilindros de gas licuado a un menor precio al ofrecido por empresas privadas. Por ejemplo, mientras un balón de gas de 15 kg puede costar $23 mil en el mercado, con el plan piloto se podía obtener-en promedio- por $15 mil. NOTICIAS RELACIONADAS Pardow defiende a ENAP y asegura que él es el «responsable político» de no perseverar con el piloto «Gas a precio justo» 336 «Gas para Chile»: Vallejo valora iniciativa y llama a «no sobreideologizar» debate sobre reforma tributaria tras polémica 890 Un reporte detallado del ministro de Energía, Diego Pardow, también dio cuenta que las familias beneficiadas fueron 1.035 en San Fernando, 1.047 en Quintero y 1.075 en Chiguayante, lo que implicó un consumo promedio de un cilindro cada mes y medio, comercializándose 5.743 durante el periodo piloto, respecto de los 6 mil proyectados. Autoridades del Gobierno salieron a respaldar la iniciativa durante toda esta semana. El ministro de Hacienda, Mario Marcel -en medio de la Cuenta Pública que realizó en la región de Coquimbo-, reconoció que «es evidente que el plan piloto no tuvo éxito», pero remarcó que «no se puede esperar que un programa piloto sea perfecto, pero sí lo que puede asegurar es que, si hay errores de diseño o de altos costos, va a tener la oportunidad de corregir, modificar antes de escalarlo a un programa más ambicioso». En la misma línea, el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, sostuvo que «por supuesto que todas las políticas piloto lo que buscan es poder iniciar una iniciativa, poder tener una evaluación crítica de las situaciones donde se tienen fortalezas y debilidades. En este caso, Enap vio sus fortalezas precisamente en el ámbito del mercado mayorista y es lo que está continuando para tener una mejor distribución a los hogares de nuestro país». Incluso, el secretario de Estado dijo que «el piloto se corta en una etapa, fue desde el mes de agosto hasta diciembre, se corta, por tanto, no termina su funcionamiento. Lo que hemos visto en los medios de comunicación es un informe en el cual toda la inversión se divide por la cantidad de balones de gas que fueron finalmente entregados. Es por eso, que efectivamente se da una suma muy alta». Consultados por Emol al respecto, los alcaldes de Chiguayante, José Antonio Rivas (PS), y de San Fernando, Pablo Silva (IND), entregaron un balance, coincidiendo en que «funcionó bien». «Nosotros esperábamos que hubiese sido un poco más voluminoso el plan piloto», reconoció Rivas. Sin embargo, dijo que «funcionó bien». Los beneficiados «están muy contentos, ellos se sienten efectivamente interpretados por esta medida, es lo que ellos buscaban, que el gas pudiese ser un bien esencial al acceso de todos y cada uno de ellos», afirmó.
